Año 7, número 12, enero-julio 2022
Vinculación multisectorial percibida en la industria cultural de la Ciudad de México
Perceived multisectorial linkage in the cultural industry of Mexico City
Grecia Irais Álvarez Serrano1
Instituto Politécnico Nacional, México
Resumen
Uno de los principales desafíos que enfrenta la industria cultural mexicana es la falta de redes de vinculación efectivas que promuevan su impacto en términos sociales y económicos. En la última década esta industria ha creado una dependencia negativa hacia el sector gubernamental, lo que limita en gran medida su capacidad de crecimiento e innovación. En alineación al último de los objetivos del desarrollo sostenible, Alianzas para lograr los objetivos, la necesidad de articular esta industria con otros sectores de interés debe ser prioridad en la toma de decisiones públicas. En la capital mexicana, la industria cultural opera en forma unilateral, por lo que el emprendimiento de estrategias y mecanismos que estrechen su relación con otras industrias o sectores generará valor agregado centrado en la innovación. El presente artículo pretende mostrar el panorama de la industria cultural de la Ciudad de México en materia de vinculación, con base en la percepción de quienes lideran algunas de las principales unidades económicas establecidas en esta localidad. Se presentan los resultados de un instrumento de investigación que analizó dos vertientes: el estatus percibido de la industria y las vías de vinculación instauradas para esta.
Palabras clave
Industria cultural; vinculación cultural; desarrollo sostenible; innovación cultural.
Abstract
One of the main challenges in the Mexican culture industry is the absence of effective linking networks that promote its social and economic impacts. In the last decade, this industry has created a negative dependence with the government, limiting its growth and innovation capacity. Alignment with the last of the sustainable development goals, Revitalize the global partnership for sustainable development, articulate this important industry with stakeholders should be a priority in public decision-making. In the case of the Mexican capital, the cultural industry operates unilaterally, so the undertaking of strategies and mechanisms that improve its relationship with more industries or sectors will generate added value focused on innovation. This article aims to show the panorama of the Mexico City cultural industry in terms of linking, based on the perception of some leaders of the main economic units that operate in that town, showing the main results of a research instrument which analyzed two main topics: the perceived status of the industry and the linking effords established for it.
Keywords
Cultural industry; cultural linking; sustainable development; cultural innovations.
DOI: https://doi.org/10.32870/cor.a7n12.7411
[Recibido: 14/7/2021; aceptado para su publicación: 12/11/2021]
Panorama de la industria cultural a nivel internacional
Por su naturaleza simbólica, la labor de fortalecer el papel de la industria cultural a nivel internacional es prioritaria y se encuentra en continuo desarrollo. La valoración de estrategias en este tenor se contextualiza desde diversas aristas acordes con las necesidades y momentos históricos de cada nación y contexto.
Con base en la definición del Diccionario de Estudios Culturales Latinoamericanos (Szurmuk y McKee Irwin, 2009), “la cultura es el espacio de los movimientos simbólicos de grupos que tejen relaciones de poder” (p. 72). Se entiende el papel trascendental de este sector en el sentido general del desarrollo, así es como la sociedad configura constantemente aquellos valores simbólicos que absorbe del entorno, lo que se vuelve, a su vez, en una nueva expresión cultural.
Lo anterior refleja el potencial y la transversalidad que la cultura puede tener en toda materia relacionada con el desarrollo social. Para efectos de esta investigación, se retoma exclusivamente la cultura en su expresión industrial, desde el valor económico que los bienes y servicios generados por la labor cultural aportan anualmente al producto interno bruto (PIB). Como señala la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO): “Hablar de industria cultural es sinónimo de aquellas industrias que constituyen una estrategia global de crecimiento y desarrollo, y que contribuyen a la revitalización de la economía nacional promocionando intercambios culturales y económicos con capacidad de innovación” (2013, p. 10).
En 2005, la UNESCO destacó la importancia en el ámbito de aplicación y regulación de la industria cultural, así como sobre su vinculación con otros instrumentos multidisciplinarios. A partir de esto se publicó La Convención sobre la Protección y Promoción de la Diversidad de las Expresiones Culturales, que funcionó como un instrumento jurídico referencial para las naciones del mundo en materia cultural. A esto se suma el potencial de impacto que tiene cultura, pues “es una condición necesaria para el desarrollo humano, económico y social, sostiene y da sentido a las políticas públicas” (Nivón, 2012, p. 11).
Diversos autores han dirigido sus esfuerzos de investigación sobre la industria cultural internacional. Entre los principales resultados de las investigaciones se encuentran los desafíos más relevantes y homólogos que esta industria ha enfrentado en la última década en el plano global (ver tabla 1). Es importante recalcar que en esta investigación se analiza el contexto para la industria cultural antes de la pandemia por la covid-19, declarada en 2020.
Tabla 1. Principales desafíos en la industria cultural internacional | |
Tópico | Descripción del desafío |
Inclusión | En la industria cultural global aún existen desigualdades significativas: en la mayoría de las actividades culturales predomina la participación masculina. Además, debe apoyarse la inclusión de grupos sociales en situación de vulnerabilidad |
Transversalidad | El potencial que tiene la industria cultural radica en su amplia vinculación con el resto de los grupos de interés, tanto en el ámbito público como en el privado. La vinculación se dificulta al tener una amplia dependencia del plan gubernamental |
Apertura | La cultura no debe ser exclusiva de visualizarse o manifestarse en espacios destinados para ello. Es necesario que incrementar los espacios en los que se puedan llevar a cabo expresiones culturales, así como los grupos vinculados con esta industria |
Descentralización | La industria cultural global tiene como problema central un alto grado de centralización. Históricamente han sido las mismas ciudades y los mismos públicos los que se han beneficiado de manera más tangible de los alcances de este sector. Los horizontes territoriales y sociales deben ampliarse |
Fuente: elaboración propia a partir del Foro de Economía y Cultura (Zapata y Hernán, 2019). |
Los retos a los que la industria cultural se enfrenta a nivel internacional tienen diversos orígenes, sin embargo, cada uno de ellos apunta hacia un tema central en común: la necesidad de apertura. Al respecto, una de las mayores apuestas que ha ganado terreno alrededor del mundo es generar vinculación a través de redes de trabajo con otros sectores, colocando al centro la industria cultural.
El trabajo en red sería de este modo un proceso de asociación racional que compensa o amplía con la red los requerimientos para la producción, circulación y consumo de los bienes culturales y amplía las condiciones de competitividad. En este caso, el trabajo cultural en red pone en el centro los valores de la eficiencia y el aprovechamiento de recursos para el logro de sus objetivos (Nivón, 2012, p. 86).
Superar las limitaciones que aquejan al sector cultural internacional mediante el establecimiento de alianzas permite atender sus necesidades de manera simultánea. En adición, si la vinculación establecida es eficaz y lógica en su planteamiento y operación, los beneficios rebasarán las necesidades de la industria cultural. El trabajo cultural, visto como una red multisectorial, tiene potencial para aumentar el impacto político de los gestores y agentes culturales, lo que facilita la implementación de políticas públicas y planes de desarrollo, tanto locales como generales. Esto generará una mayor visibilidad para la cultura, lo que la volverá tangible para más usuarios, en beneficio de la sociedad en general.
La industria cultural en México
México enfrenta un gran desafío en términos económicos y sociales, dos de los ejes esenciales del desarrollo sostenible. Al estar suscrito a tratados y agendas internacionales culturales como la Agenda 21 de la Cultura o la Agenda 2030, requiere que su industria cultural desempeñe un rol vinculante y de apoyo para superar estas problemáticas, a la vez que le permita desarrollar proyectos que coadyuven al logro de los objetivos internacionales, donde la creación de alianzas es materia prioritaria.
En 2019 la industria cultural mexicana representó 3.15% del PIB, a través de los casi 140 000 empleos formales situados en el quehacer cultural (Instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI, 2021). En contraste con la década anterior, se evidencia un decrecimiento de 21.25% en su aportación, ya que esta industria generó 4% del mismo indicador en el año 2009 (García, 2020). Dentro de las razones centrales que se atañen a esta pérdida se encuentran la falta de dinamismo y la poca difusión que se tiene para los proyectos culturales a nivel nacional.
En la tabla 2 se presentan los resultados de los últimos cinco años en cuanto a la aportación económica que la cultura ha representado para México en términos de PIB y puestos de trabajo remunerados.
Tabla 2. Evolución del impacto económico de la industria cultural en México | ||
Año | Aportación al PIB | Puestos de trabajo |
2015 | 3.41% | 1 349 036 |
2016 | 3.26% | 1 377 763 |
2017 | 3.18% | 1 407 663 |
2018 | 3.17% | 1 417 828 |
2019 | 3.15% | 1 395 644 |
Fuente: INEGI (2021) |
Durante cuatro de los cinco años descritos, la tendencia se muestra decreciente en términos de PIB, aunque se encuentra un incremento en puestos de trabajo. No obstante, según la información de 2017, respecto al aporte de los bienes, los servicios informales e ilegales que no son detectados por las mediciones oficiales –también conocido como economía sombra–, la aportación puede crecer hasta 7.3% del PIB, mientras que habría más de 2 millones de empleos ocupados, tanto formales como informales (Piedras, 2017).
En adición, de acuerdo con los datos presentados por Forbes (2017), la cultura es uno de los sectores con más capacidad de superávit para el país, tomando como base el potencial de comercio internacional de sus bienes y servicios. Asimismo, dentro del posicionamiento en materia cultural resulta relevante el atractivo de México como país con diversas muestras culturales que atraen el reconocimiento internacional y la visita de turistas extranjeros.
Villalobos (2017) señala que los límites de la industria cultural en México tienen relación directa con la delimitación de sus instituciones. Con el propósito de lograr que la sociedad disfrute del quehacer cultural es necesario que las instituciones públicas promuevan la vinculación de este sector con las manifestaciones culturales, más allá de financiar al sector o desprender líneas de acción con matices culturales; para esto, se demanda una participación activa e integral por parte del Estado y sus instituciones. La vinculación con múltiples sectores puede derivar en crecimientos económicos para esta industria, además de su consolidación en cuanto a la participación ciudadana, debido a la capacidad de transformación y configuración social que la caracteriza.
La UNESCO (2021) establece que la participación ciudadana es indispensable para el desarrollo económico de la industria cultural, así como la integración y el involucramiento de otros sectores, como el económico, organismos, agentes productores y distribuidores de contenidos. Aunado a lo anterior, se encuentra la necesidad de un compromiso gubernamental firme que coadyuve con la generación de empleos para la industria, además de estímulos fiscales e inversión.
Se entiende que el Estado debe retomar y aumentar el papel de la industria cultural, ya que su importancia e impacto en el desarrollo social y económico de la nación es innegable, particularmente en las zonas más vulnerables y con poco acceso a actividades de esta índole. Es crucial lograr la participación y la vinculación con otros sectores de relevancia (como el económico, el educativo, el medioambiental y el social), así como lo establecen los planes orientados al desarrollo sostenible.
Contexto de la industria cultural en la Ciudad de México
La Ciudad de México es un referente de fortalecimiento del sector cultural a nivel nacional. Como lo expresa Marcelo Ebrard en su participación dentro del Libro verde para la institucionalización del Sistema de Fomento y Desarrollo Cultural de la Ciudad de México, “cualquier persona que ha pisado la Ciudad de México puede notar el potencial que existe en ésta para ser vista como una ciudad de élite en cuanto a oferta cultural” (Nivón, 2012, p. 18).
En materia legal, en el artículo 5º de la Ley de Fomento Cultural del Gobierno de la Ciudad de México (Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial de la Ciudad de México, 2019), respecto al fomento y desarrollo cultural, se establecen 22 objetivos rectores que regulan las expresiones culturales en la ciudad, estos le competen y son responsabilidad de las autoridades culturales.
Los objetivos plantean la importancia del sector cultural en la ciudad, donde se le atribuye alto grado de vinculación con sectores estratégicos, lo que potencia la investigación y el desarrollo de industrias que beneficien al sector y viceversa. La relación y sus beneficios son multilaterales, facilitando la inserción de estos sectores en un esquema de vinculación.
Desde la adhesión de la Ciudad de México a la Agenda 21 de la cultura en 2011, se han desarrollado diversas acciones a fin de conseguir que las políticas públicas culturales se orienten hacia una meta común: la libertad cultural a través de la garantía de los derechos culturales de los ciudadanos. Los siguientes principios y objetivos destacan por tener relación directa con la importancia del trabajo en la vinculación:
Sumado a lo anterior, como lo establece el Programa Institucional de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (2020), “se busca la implementación de una política de carácter transversal e incluyente que garantice el respeto a los derechos de todos los habitantes de la Ciudad de México, y que genere y fortalezca redes que potencien la creatividad a partir de la relación entre los actores” (p. 14). De este Plan resalta el sexto de sus objetivos, que versa sobre la garantía al reconocimiento multicultural de la Ciudad de México a través de programas incluyentes que propicien la cooperación y el respeto mutuo de los diversos actores, a nivel local, nacional e internacional (Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, 2020, p. 2).
La importancia de contar con mecanismos que favorezcan la vinculación de la industria cultural con otros sectores de interés –más allá del plano gubernamental– es notoria. Con esto se crean alianzas para el logro de objetivos comunes, lo que concuerda con el último de los objetivos del desarrollo sostenible. La vinculación es una herramienta que puede lograr que esta industria sea un referente económico local y nacional, además de una mayor difusión social.
La Ciudad de México cuenta con un sistema legal definido y en alineación con las políticas públicas, por lo que la operación de estas alianzas debe ser más fluida y sobresaliente cuando se tengan objetivos definidos y compartidos entre cada uno de los agentes involucrados.
Metodología de la investigación
A partir de los componentes teóricos expuestos en los apartados anteriores y como parte del desarrollo de una investigación más a profundidad sobre el papel de la industria cultural en la consecución del desarrollo sostenible, se planteó un apartado de campo dentro de esta investigación con el objetivo central de conocer y analizar la percepción de quienes conforman la industria cultural de la Ciudad de México; esto en relación con las vías de vinculación para este importante sector. Dentro de este proceso, se apremió la participación de personajes estratégicos, como directores operativos, productores o gestores culturales dentro del sector gubernamental de la Ciudad de México.
La investigación fue de tipo cualitativo, las opiniones obtenidas fueron medidas como afirmaciones en relación con cuestiones específicas a través de un cuestionario. Se recurrió al Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE) en su actualización de noviembre de 2020 para conocer las unidades económicas contabilizadas de manera oficial para la industria cultural de la Ciudad de México, así como para obtener datos de contacto con estas.
La base de datos arrojó un total de 690 registros oficiales de unidades económicas, los cuales fueron considerados como el universo de estudio. Posteriormente, se realizó el cálculo de la muestra representativa necesaria para validar la representatividad en los resultados. Para ese fin se contemplaron los siguientes datos base:
La cifra presentada como diversidad del universo corresponde al número de categorías para la industria cultural mexicana aceptadas por la Ley Federal del Derecho de Autor: la totalidad del universo se compone por catorce (Piedras, 2004, p. 48). Esta Ley rige la investigación en términos de clasificación de las expresiones culturales que serán aceptadas como parte de la industria cultural de la Ciudad de México.
Con apoyo de la aplicación digital Netquest, que lleva a cabo el cálculo de la muestra representativa con base en el Teorema Central del Límite, se procede a calcular el tamaño del valor previamente mencionado, lo que resulta en una muestra de 25 encuestados tras ingresar los datos correspondientes.
El teorema central del límite dice que, si obtenemos múltiples muestras de n individuos de una población infinita, la media de estas muestras tiende a una distribución normal centrada en la media de la población. Y dice algo más: esta distribución normal tiene una desviación típica igual a la desviación de la población de origen dividida por √n (Netquest, 2020).
Para la operacionalización de los resultados se redactó un breve marco referencial centrado en los principales desafíos que enfrenta la industria cultural mexicana, detonando el potencial de vinculación para la cultura en la Ciudad de México. En seguida, se elaboró el cuestionario de investigación, el cual constó de quince ítems con líneas centrales de evaluación sobre la percepción de la industria cultural y las vías de vinculación detectadas por parte de los encuestados, segmentando los resultados hacia los sectores que pueden contribuir mayormente en el fortalecimiento de la industria cultural: el gobierno, el medio ambiente, la sociedad y la economía. Lo anterior en relación con el contexto general elaborado en el marco de referencia, que se hizo llegar a cada participante.
El cuestionario estuvo basado en la escala tipo Likert, en consonancia con el tipo de investigación cualitativa. Por esta razón, el instrumento homologó sus criterios a los fines y el carácter de la investigación. De acuerdo con la estructura básica de esta escala (que consta con la mitad de valoraciones a favor y la otra en contra), cada ítem contó con cinco alternativas de respuesta:
Las invitaciones a participar del cuestionario de investigación se hicieron llegar por correo electrónico con base en los registros obtenidos, en donde además se adjuntó el marco referencial para contextualización del tema y del objetivo, tanto del cuestionario como de la investigación. Se priorizó como criterio central de participación aquellos registros que contaban con datos de contacto con personal estratégico de la unidad de negocio. Una vez filtrados los registros se procedió a establecer el contacto con las unidades de negocio seleccionadas de forma aleatoria.
El instrumento se aplicó en marzo de 2021 a través de una plataforma de encuestas en línea, por medio de la cual se envió un recordatorio de participación durante las primeras dos semanas. El número previsto en la muestra representativa se consiguió una quincena después de este recordatorio. En total, se enviaron 50 invitaciones a distintas empresas, aunque se contabilizan solo 38 de ellas, ya que las restantes fueron rechazadas por los sistemas de mensajería debido a dos razones: dominio inexistente o saturación en la bandeja de entrada del destinatario.
La tasa de respuesta ante las invitaciones fue de 66%, un porcentaje considerable debido a las condiciones atípicas y críticas que azotaban al sector económico internacional durante las semanas de aplicación. A continuación, se presentan los resultados más representativos para cada una de las líneas de evaluación planteadas. La interpretación de los resultados se realizó con base en los antecedentes teóricos examinados y con especial apego a aquellas respuestas que evidencian las limitaciones para la industria cultural en la capital mexicana.
Percepción de la industria cultural
Como se señaló anteriormente, el cuestionario estuvo dirigido a los estrategas administrativos y operativos de las unidades económicas de la industria cultural registradas hasta noviembre de 2020 en el DENUE. A partir de la aportación de los participantes –y reconociendo previamente el rol que juegan dentro de la industria cultural–, se pretende que los resultados obtenidos coadyuven en la construcción de políticas públicas en materia cultural, así como enriquezcan el rol de esta industria en el crecimiento económico y el desarrollo social mexicano.
Respecto a los ítems planteados, se estructuraron en tres partes, dentro de la primera se evaluó el estatus sobre la industria cultural percibido por los participantes. Los resultados iniciales se muestran en la tabla 3.
Los resultados obtenidos en la primera parte del cuestionario mostraron una opinión generalizada y enmarcada por la mayoría de los participantes, en la que la industria cultural de la Ciudad de México es vista como un pilar esencial para el progreso de la entidad, además de ser un factor que coadyuva al desarrollo sostenible, siempre que sea incluida en todo plan que busque su consecución a largo plazo y de modo trascendente.
Tabla 3. Postura inicial percibida sobre la industria cultural de la Ciudad de México | ||
Ítem | Tópico | Resultados |
1 | Rol de la industria cultural en el progreso de la Ciudad de México | La totalidad de los participantes consideró inamovible el rol de la industria cultural para lograr el progreso de la entidad de estudio |
2 | Acceso a contenidos culturales | 66% de los participantes mencionó que es difícil acceder a contenidos culturales en la Ciudad de México |
3 | Capacidad de crecimiento de la industria cultural | 92% de los participantes indicó que la industria cultural de la Ciudad de México debe buscar vías alternas de fortalecimiento para garantizar su crecimiento |
4 | Rol de la industria cultural en el desarrollo sostenible | 96% de los participantes señaló que es necesario que la industria cultural de la Ciudad de México se incluya en los programas hacia el desarrollo sostenible |
Fuente: elaboración propia a partir de los resultados de la investigación. |
Resulta relevante que la mayoría de los encuestados se mostró de acuerdo respecto a la dificultad de acceso a los contenidos culturales que derivan de la industria cultural en la Ciudad de México. Cabe mencionar que los participantes son activos en la toma de decisiones dentro de la industria cultural, por lo que las respuestas brindadas cobran mayor valor e invitan a reflexionar sobre la importancia de fortalecer el sector cultural para logre una mayor visibilidad, así como la capacidad de llegar a más usuarios y retener a la audiencia cautiva, superando así una de las dificultades manifestada históricamente en este tenor.
El estudio del consumo cultural en México ha vivido un desarrollo vertiginoso en la última década, fundamentalmente porque ha sido estimulado desde disciplinas y ámbitos diversos y por una gama amplia de demandas, que abarcan desde la búsqueda de democratización de las políticas culturales hasta la mejor mercantilización de las industrias culturales (Mantecón, 2005, p. 239).
A partir de lo observado por Mantecón (2005) y en concordancia con los resultados previamente expuestos, es necesario considerar la necesidad de contar con vías alternas para su fortalecimiento en la industria cultural, lo cual puede tener múltiples variables de importancia en juego. Se identifica que los participantes perciben una participación limitada en las líneas centrales que dicta la política cultural de la Ciudad de México, la cual “no es ajena a lo que ocurre en el conjunto de las políticas públicas en los últimos 15 años” (Nivón, 2012, p. 263).
Es vital escudriñar sobre modelos de promoción y vinculación que rebasen la actuación gubernamental, como se ha hecho en los últimos años, logrando sacar a esta industria del estado de estancamiento percibido para estos temas.
Los resultados de los participantes ayudaron a consolidar como elemento central el factor caótico ocasionado por la pandemia por la covid-19, cuyos estragos económicos repercutirán directamente en el panorama expuesto en este apartado. La crisis internacional está cambiando al sector cultural, sin embargo, los logros que ha tenido en los últimos treinta años son significativos. Las políticas culturales y públicas son la manera en la que se puede salvaguardar la cultura (UNESCO, citado en Rivera, 2020).
Vías de vinculación detectadas
Para conocer la percepción de los encuestados en relación con los esfuerzos detectados en materia de vinculación multisectorial para la industria cultural de la capital mexicana, desde su radar de conocimiento y alcance, se establecieron diferentes ítems comprendidos en cuatro áreas centrales. En la tabla 4 se muestra la generalidad de los resultados estadísticos.
De estos resultados puede inferirse que los estrategas de la industria cultural buscan salvaguardar el potencial de esta a través de la difusión de los diferentes programas educativos afines dentro del territorio de estudio. Para ello se visualiza como necesario el trabajo en red de manera minuciosa con el sector educativo ya que de este se desprenden las regulaciones generales para cualquier área del conocimiento.
Tabla 4. Opinión sobre la vinculación en la industria cultural de la Ciudad de México | ||
Ítems | Tópico | Resultados |
5 y 6 | Vinculación con el sector educativo | 61.11% de los participantes mencionó que no existen vías que promuevan la formación educativa en áreas culturales en la Ciudad de México |
7 y 8 | Vinculación con el sector medio ambiental | 55.56% de los participantes presentó un grado de desconocimiento considerable sobre mecanismos de vinculación entre la industria cultural y el plano medio ambiental |
9 y 10 | Vinculación con el sector social | 61.11% de los participantes indicó que es necesario mejorar la visibilidad y la comunicación de la industria cultural con la sociedad de la Ciudad de México |
11 y 12 | Vinculación con el sector económico | 61.11% de los participantes consideró que las estrategias de promoción económica de la industria cultural no son novedosas o factibles |
Fuente: elaboración propia a partir de los resultados de la investigación. |
Por otra parte, la vinculación de los sectores económicos con el cuidado medio ambiental es uno de los temas que mayor importancia en cualquier nación que haya ratificado los objetivos de la Agenda 2030.
Sería oportuno promover la inversión para que empresas con capacidad técnica y científica auspicien la competitividad ambiental, también en los países más pobres, tomando en cuenta los nocivos impactos ambientales a nivel global y los incentivos para enfrentarlos, con una actividad formal que puede tener un alto rendimiento para los gobiernos y las empresas involucradas (Terzi, 2019, p. 213).
En concordancia con lo anterior, aún existen muchos desafíos que enfrentan las industrias respecto a los retos ambientales del desarrollo sostenible, comenzando por el desconocimiento de las vías de contribución hacia este, lo cual se presenta también en la industria cultural de la Ciudad de México. Los resultados muestran que se requieren medidas complementarias que acerquen a quienes se desempeñan en puestos estratégicos en ambos sectores: cultural y medioambiental. El potencial de la acción colaborativa entre estas dos áreas vitales es innegable, la industria cultural puede coadyuvar en la creación de consciencia colectiva y recodificación de actuares de la sociedad en materia de protección al medio ambiente.
Para lograr una participación mayor de esta industria en relación con temas que, de origen, rebasan sus patrones naturales de acción, es necesario que la sociedad se encuentre mayormente inmersa con las actividades y las expresiones derivadas. Es necesaria una reestructura en las vías de promoción que se han experimentado para sector cultural de la Ciudad de México.
Respecto al último tópico evaluado en esta parte del cuestionario, se entiende que es una necesidad latente fortalecer la aportación económica de la industria cultural en la Ciudad de México, con propuestas y mecanismos sólidos, además de un grado de innovación destacable que coadyuve al aseguramiento de su trascendencia. Asimismo, deben comunicarse los impactos económicos que, de manera anual, la industria cultural capitalina aporta a indicadores nacionales, ya que es un punto de partida importante para que otros sectores estratégicos, así como la sociedad en general, reconozcan la importancia de esta industria en planos aledaños a los naturales e internos.
A mediano plazo, sería posible visualizar el crecimiento económico de esta industria cuidando la formalización de toda aquella operación cultural que, a la fecha, no se contabiliza en las mediciones oficiales y que, como se abordó previamente, suman una importante contribución.
Finalmente, los ítems 13 al 15 se plantearon con el objetivo de conocer los puntos relevantes que deben incluir las medidas de vinculación deseables para la industria cultural de la Ciudad de México. A continuación, se resumen las ideas principales:
Una red es necesaria como disciplina, con el objetivo de consolidar, de establecer hábitos y vínculos colaborativos entre centros para compartir experiencias, para desarrollar proyectos conjuntos, de tal manera que la actividad entre ellos no se vuelva una competencia sino un trabajo que fortalezca a todos (Lara, citado en González, 2015, p. 117).
El potencial de la industria cultural en la Ciudad de México puede presentar un crecimiento importante si se dirigen los esfuerzos hacia la vinculación como parte del plan estratégico sectorial, especialmente en materia de crecimiento económico y desarrollo social. La creación de alianzas entre sectores de relevancia permitirá establecer canales de comunicación y actuación multilaterales, los cuales serán la base que enaltezca el camino de todos aquellos involucrados en la labor cultural.
En adición, debe priorizarse la participación de los hacedores de cultura en la elaboración de estos planes, ampliando el potencial de éxito de las propuestas que se establezcan. Fortalecer la industria cultural de la capital mexicana con la implementación de políticas culturales participativas, conclusivas y al servicio de la ciudadanía y del desarrollo sostenible contribuirá con la mejora en la calidad de vida y el bienestar de sus habitantes, como lo señala el Programa Institucional de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (2020).
Conclusiones
Los resultados del presente artículo evidencian las limitaciones más representativas distinguidas por los estrategas de las empresas que pertenecen a la industria cultural de la Ciudad de México, las cuales poseen estructura y respaldo suficiente para ser reconocidas como unidades económicas establecidas para el directorio nacional y para la Ley Federal del Derecho de Autor, instrumentos en los que también resalta la necesidad de definir los alcances de las categorías aplicables para la industria en cuestión. En este sentido, la homologación de criterios debe ser prioritaria para mejorar la visibilidad y la trascendencia de este sector económico.
Respecto a la percepción del estatus de la industria cultural, se entiende que los informantes reconocen su papel en temas de interés local y nacional (como el crecimiento económico y el progreso social), los cuales deberían trabajarse de manera simultánea, como se infiere con los resultados. A pesar de que ambos puntos son pilares en el desarrollo sostenible, aún existe desconocimiento sobre las vías de incorporación de la industria cultural hacia la sostenibilidad. Las respuestas presentadas evidencian una postura ajena para la industria cultural de la Ciudad de México, aun cuando es considerada como el cuarto pilar del desarrollo sostenible por numerosos investigadores de diversas disciplinas y áreas de conocimiento a nivel global.
Hacen falta capacitaciones integrales para formar a los directivos y el personal estratégico de las empresas culturales sobre su rol transversal en objetivos que se valoran desde diferentes aristas. Los participantes manifestaron el potencial que perciben para la creación de vínculos con otros sectores, no obstante, no se visualizan soluciones para generar beneficios para la industria cultural que, a su vez, logren contribuciones para todos los participantes en la vinculación establecida.
En cuanto a los esfuerzos que se han emprendido para vincular a la industria cultural de la Ciudad de México con otros sectores, se evidencia la autonomía limitada con la que esta industria opera, dificultando la consolidación de redes de trabajo. En adición, se infiere de los resultados previamente expuestos que los líderes de esta industria buscan promover su apertura al incluir las diferentes vertientes que se derivan de su quehacer en las disciplinas a través de la experiencia compartida, la cual suele tener poca visibilidad.
Ante la reapertura económica y comercial que se experimenta para todos los sectores económicos de la Ciudad de México, debe tenerse en claro el panorama que rodea a la industria cultural, considerando no solo sus beneficios naturales y las capacidades de resiliencia que históricamente ha mostrado. Debe comunicar sus limitaciones y áreas de oportunidad de manera estratégica, a fin de lograr propuestas normativas objetivas que se consoliden como modos de operación en la entidad de estudio. La participación bilateral entre el gobierno y los estrategas de esta industria es un punto de partida innegable; si se rebasan los límites de esta dualidad por medio de un trabajo multilateral, habrá mayores beneficios con un mayor alcance social, tanto de los consumidores culturales como de los que no lo son.
Esta industria tiene retos homólogos a nivel internacional, como expandir los alcances de la investigación local replicándola en otras entidades (tanto mexicanas como internacionales); puede facilitar el establecimiento de mecanismos legales y operativos, que robustezcan la estructura aplicable a la promoción y operación de la cultura; en términos industriales, al beneficiar a quienes se encuentran inmersos en ella y a sus consumidores.
De esta manera se aporta, además, al logro de los objetivos del desarrollo sostenible, como: 8) Trabajo decente y crecimiento económico, 16) Paz, justicia e instituciones sólidas, y 17) Alianzas para lograr los objetivos.
Finalmente, es importante resumir las áreas de oportunidad detectadas en materia de vinculación para la industria cultural de la capital mexicana:
La evolución y la consolidación de trabajo en vinculación con sectores que pueden enaltecer la labor cultural y las distintas expresiones que alberga (como lo son el económico, social, medioambiental y lo gubernamental) permiten generar beneficios inmediatos. Al tratarse de perspectivas a mediano y largo plazo, la industria cultural podrá ir más allá de sus propias fronteras, así como aquellas externas que ha vislumbrado hasta el día de hoy, lo que genera un mayor número de contenidos enteramente culturales, y un soporte a otros sectores, reafirmando así las razones por las que se le considera un pilar esencial para el crecimiento económico y el bienestar social.
Referencias
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CÓMO CITAR ESTE ARTÍCULO
Álvarez Serrano, G. I. (2022). Vinculación multisectorial percibida en la industria cultural de la Ciudad de México. Córima, Revista de Investigación en Gestión Cultural, 7(12). https://doi.org/10.32870/cor.a7n12.7411
1 Licenciada en Relaciones Comerciales y maestra en Administración de Empresas para la Sustentabilidad, ambas cursadas en la Escuela Superior de Comercio y Administración del Instituto Politécnico Nacional, México. Correo electrónico: galvarezs1000@alumno.ipn.mx. ORCID: https://orcid.org/0000-0003-4797-979X